Mallorca

La isla de la calma

Entre playas y montañas se encuentra el paraíso mediterráneo. Recorrí las calles empedradas mientras me dirigía a la icónica Catedral de Palma y pude admirar su increíble arquitectura. Su rica historia, que se remonta a los fenicios y romanos, se respira en cada rincón, desde las murallas de Palma hasta las ruinas romanas de Pollensa.

Paseé por las estrechas calles del casco antiguo, admirando la arquitectura gótica y renacentista, y me perdí en el bullicio del mercado de Pere Garau, donde pude degustar platillos locales como la sobrasada y el queso de Mahón.

Más allá de Palma, Mallorca me regaló paisajes de ensueño. Recorrer la Serra de Tramuntana fue una experiencia única, ver los pueblos pintorescos y vistas panorámicas del Mediterráneo. Nadé por las aguas cristalinas de la Cala Sa Calobra, una cala virgen de belleza incomparable, y me detuve a tomar el sol y tomarme el tiempo de admirar la vista.

Mallorca también cuenta con una gastronomía deliciosa. Probé el tradicional tumbet, un pastel de verduras al horno, y me deleité con la frescura del pescado y marisco local en los chiringuitos de la playa. Disfruté de una copa de vino mallorquín en una terraza con vistas al mar y no me pude contener en probar la tentación de la ensaimada, un dulce típico de la isla.

La vida nocturna en Mallorca es tan vibrante como sus paisajes. En Palma, la zona de Santa Catalina cuenta con una amplia variedad de bares y discotecas para todos los gustos. Si buscas un ambiente más tranquilo, los pueblos costeros como Magaluf y El Arenal cuentan con bares y pubs animados.

Para moverte por la isla, Mallorca tiene una eficiente red de transporte público. Autobuses y trenes que conectan las principales ciudades y pueblos, y un servicio de ferry que me permitió explorar las islas vecinas. El aeropuerto de Palma de Mallorca (PMI) recibe vuelos desde toda Europa, lo que facilita el acceso a la isla.

Mallorca es un destino ideal para todo tipo de viajeros. Amantes de la historia, la naturaleza, la gastronomía y la vida nocturna encontrarán en esta isla un paraíso mediterráneo que les cautivará para siempre.

¿Te animas a descubrirla?

Lugares emblemáticos

  • Catedral de Palma

    La catedral alberga una impresionante colección de obras de arte, incluidas vidrieras, esculturas y pinturas.

  • Palacio Real de la Almudaina

    Utilizada por la familia real española. El palacio está abierto al público para visitas y alberga un museo que narra la historia de Mallorca.

  • Castillo de Bellver

    El castillo ahora alberga un museo de historia militar y ofrece impresionantes vistas de la ciudad y la campiña circundante.

  • Sierra de Tramontana

    La cadena montañosa que recorre la costa noroeste de Mallorca es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

  • Cuevas del Drach

    Las cuevas albergan un lago subterráneo en el que se realizan paseos en barco. Las paredes de las cuevas también están decoradas con impresionantes formaciones de estalactitas y estalagmitas.

  • Cala d'Or

    Conocida por sus aguas cristalinas y su playa de arena blanca. Cala d'Or es un lugar popular para nadar, tomar el sol y practicar deportes acuáticos.

¿Qué hacer en Mallorca?

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Palma, la vibrante capital de Mallorca, alberga una impresionante catedral gótica, el Palacio Real de la Almudaina y una gran variedad de tiendas, restaurantes y bares.

Haz una excursión en barco a Cabrera desde varios puertos de Mallorca y disfrutar de la natación, el senderismo y el buceo.

Ve un espectáculo de flamenco…

Haz una excursión en barco a Cabrera desde varios puertos de Mallorca y disfrutar de la natación, el senderismo y el buceo.

Mallorca cuenta con varios parques acuáticos, como Aqualand El Arenal y Hidropark, que son perfectos para pasar un día de diversión en familia